20 abr 2008

Las bilbaínas detectan 30 puntos negros para su seguridad


Traemos aquí el primer ejemplo de buena práctica en materia de género. El reportaje lo publicó El Correo y consiste en un inventario de lugares bilbaínos poco propicios para el paseo en solitario. Es el fruto del trabajo de colectivos feministas y asociaciones vecinales. Lo copiamos íntegro, pero quien desee acceder al original, puede hacerlo aquí.


Violencia sexista
Las bilbaínas detectan 30 puntos negros para su seguridad
Un informe en el que participan 20 asociaciones vecinales y feministas señala zonas de riesgo de la ciudad

La última agresión sexual que tuvo lugar en pasado sábado en las escaleras de Iturribide ha sacado a la luz el eterno debate sobre la falta de seguridad que se vive en determinados espacios de Bilbao. Este acceso, situado entre el Casco Viejo y Santutxu, es sólo uno de los calificados como «conflictivos». Un informe elaborado por el Departamento de Mujer del Instituto de Promoción de Estudios Sociales señala la existencia de más de una treintena de puntos negros escondidos en diferentes barrios de la villa que son considerados peligrosos por las mujeres. En la elaboración del estudio han colaborado veinte asociaciones de la capital vizcaína, tanto vecinales como feministas, que se han encargado de llevar a cabo un exhaustivo trabajo de campo. El método utilizado ha sido el siguiente. Un total de 61 mujeres pertenecientes a los distintos colectivos han recorrido, en grupos de hasta doce personas, barrios bilbaínos como Abando, La Peña, Basurto, Deusto, Uribarri, San Ignacio, San Adrián o Zorroza, en los que han detectado alrededor de 32 espacios que podrían entrañar algún peligro. Cabe señalar que las participantes tienen entre 18 y 67 años y su perfil es muy diferente: desde amas de casa o jubiladas hasta empleadas y estudiantes. Las cuestiones que se han tenido en cuenta a la hora de valorar cada zona son, entre otras, la iluminación; si se ve a una persona a 25 metros de distancia; la señalización, es decir, si en caso de ser agredida sería capaz de saber fácilmente dónde se encuentra; la posibilidad de conseguir ayuda con rapidez; el uso de los locales de alrededor o la existencia de algún punto 'trampa'. Un informe previo, en este caso de arquitectura, llevado a cabo hace dos años por Hiria Kolektiboa, señalaba ya la existencia de cinco espacios que las bilbaínas consideraban inseguros de noche: las plazas de Rekalde, Unamuno y San Pedro, esta última, más concretamente, en la zona de la Pérgola, así como el paso subterráneo de la estación de Abando y la avenida Madariaga, en su confluencia con galerías de Deusto. La lista, no obstante, es bastante más larga. Las asociaciones han detectado gran variedad de puntos conflictivos que van desde calles principales, puentes, escaleras y estaciones de tren hasta parques. En rojoEl estudio marca en rojo, por ejemplo, seis zonas de esparcimiento de la villa: el frontón de Zorroza; el parque de La Peña; el de Sarriko
-específicamente, en los alrededores del campo de fútbol y la escuela Ibaigane-, y el de Basurto, con caminos poco iluminados. También se mencionan parques emblemáticos como el de Etxebarria, en la parte en la que se ubica el ascensor que conecta con el Casco Viejo; o el de Doña Casilda, sobre todo en la zona de la Pérgola. «Muchas mujeres dan una vuelta importante para evitar pasar por ahí», aseguran desde los diferentes colectivos. Las de Iturribide no son tampoco las únicas escaleras conflictivas de la ciudad. El documento precisa, en este sentido, accesos como el que conecta Mazarredo con Uribitarte -a la altura de un conocido restaurante-, «estrecho y oscuro»; las escaleras hacia la plaza Moraza o las que se encuentran en la calle Pintor de Etxenagusia, junto a la antigua ikastola Intxusti, que, según apunta el informe, «no llevan a ningún lado». Las asociaciones destacan un último espacio, conocido como las escaleras de 'los gatos', que unen Uribarri con el Ayuntamiento. «Allí han pasado muchas cosas, entre ellas, robos. A ciertas horas dan miedo», consideran. Los puentes y las estaciones de tren son otros de los puntos negros sobre los que hace especial hincapié el estudio. La parte baja de la pasarela de Miraflores o los puentes de Rekalde y Siete Campas son los tres viaductos a reseñar. Estos dos últimos, debido a que «no se ven bien ni las entradas ni las salidas», lo que potencia la sensación de inseguridad. En el caso de Rekalde se une, asimismo, otro factor. «Las escaleras se presentan como un buen sitio para que alguien se esconda», advierten las mujeres. Las dos estaciones que suscitan mayor controversia son la de Abando y la de Ollargan. La primera, en la parte trasera que conecta con Feve. «Una calle muy pequeña y no demasiado iluminada», aprecian las autoras. La segunda, debido a que las diferentes salidas cuentan con escaleras que «apenas se adivina dónde terminan». Arterias principalesPor último, el informe recoge determinados puntos, algunos de ellos arterias principales de la ciudad, que son considerados peligrosos, sobre todo, por la noche. El más llamativo es la calle Hurtado de Amézaga, que conecta las plazas Zabalburu y Circular. «Hay momentos en los que está vacía y en uno de los flancos sólo hay pared y aparcamientos», apuntan. En este sentido, proponen aumentar el alumbrado y poner más pasos de cebra que conecten ambas aceras. El grupo Basabe, en Deusto, es otro punto crítico. «Desde San Felicísimo hasta el canal hay un nuevo aparcamiento con poca luz. Los fines de semana, las jóvenes que salen por la noche esperan a que les vayan a buscar sus familiares», aseguran. Los soportales de las viviendas de la avenida San Adrián, la entrada del ascensor de Arangoiti o las galerías de Deusto son otros espacios que generan percepción de vulnerabilidad.

LUGARES MÁS PELIGROSOS PARA LAS MUJERES EN BILBAO
Radiografía distrito a distrito
El informe ha sido elaborado por el Instituto para la Promoción de Estudios Sociales, en colaboración con veinte asociaciones, tanto vecinales como feministas, de la capital vizcaína. Un total de 61 mujeres han recorrido distintos barrios de la villa para valoras los distintos puntos negros de cada uno. Tienen entre 18 y 67 años . Perfiles, desde amas de casa hasta estudiantes, trabajadoras y jubiladas. Parque Doña Casilda: Tiene muchos espacios peligrosos, como el emplazamiento de la pérgola. Las mujeres dan una vuelta importante para evitar pasar por ahí, sobre todo de noche. [Ver
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] Hurtado de Amézaga: A determinadas horas la calle está vacía y en uno de los laterales sólo hay pared y aparcamientos. Solución: más luz, pintura y poner más pasos de cebra para conectar ambas aceras. [Ver imagen]Parte trasera de Abando-Feve: Calle pequeña y no demasiado iluminada.
[Verimagen]Paseo Guggenheim: Falta alumbrado. [Ver imagen]Mazarredo: Hay poca luz y se producen robos. Las escaleras para bajar a Uribitarte, a la altura de un conocido restaurante, son muy pequeñas y oscuras. Estación Ollargan: Tiene muchas salidas, con escaleras que inspiran temor y no se ve dónde terminan. [Ver imagen]Parte inferior del puente de Miraflores: Zona desierta. [Ver imagen]Parque de La eña: Por la noche da miedo. No suele haber nadie. [Ver imagen]Parque cercano al hospital de Basurto: Todos dicen que es peligroso. Se encuentra entre dos carreteras principales y es como una isla. Tiene caminos y escaleras raras, y zonas oscuras. Sólo van los que tienen perros. [Ver imagen]Paso subterráneo de General Eguia: Falta luz. No se ve nada. Puente de Rekalde: Solitario. No se vé a dónde dan las escaleras y puede ser un buen sitio para esconderse. Camino de Masustegui: Vacío, sin arreglar. Grupo Basabe: Desde San Felicísimo hay un parking nuevo que tiene muy poca luz. Las chicas jóvenes que viven allí dicen que, cuando salen de noche, los de casa van a
buscarlas. No hay espacios para poder escapar. Entrada al ascensor de Arangoiti: En muy mal estado. [Ver imagen]Galerías Deusto: Vacías, con recovecos. [Ver imagen]Calle Morgan: Sobre todo en la zona de San Felicísimo y el canal de Deusto. No suele haber nadie, está poco iluminado. [Ver imagen]Ribera de Deusto: Escasa iluminación. [Ver imagen]Avenida San Adrián: Los soportales de las viviendas son buenos escondites. Poner más cabinas para poder llamar por teléfono. Calle Ramón Barue: Calle oscura. A una de las mujeres que hizo el trabajo de campo le salió un hombre y se pegó un buen susto. Parte alta de Madariaga: Solitaria y sin salida. Parque de Sarriko: Alrededores del campo de fútbol y la escuela Ibaigane. Oscura, poca gente. [Ver imagen] Juan de Antxeta: Estrecha. Por un lado el tren y por otro la parte
baja de las viviendas. Túneles. Avenida Zarandoa: Vacía y oscura. Las luces están pensadas sólo para los vehículos. [Ver imagen] Calle Orixe: Grande y amplia, pero oscura y solitaria. Pintor de Etxenagusia: No hay nada en esta calle. Hay una casa al lado de lo que era la ikastola Intxusi y justo ahí, unas escaleras que no llevan a ningún lado. Escaleras de los 'Gatos' (Uribarri): Peligrosas, han pasado muchas cosas (robos). Dan miedo. [Ver imagen] Escaleras hacia la plaza Moraza: Zona que atemoriza al paseante. [Ver imagen] Parque Etxebarria de noche: Sobre todo en la zona del ascensor que conecta con el Casco Viejo de la villa. [Ver imagen] Vía Vieja de Lezama: Muy larga y solitaria. En una de las partes no tiene nada, sólo monte y ahora están excavando un parking. [Ver imagen] Frontón Zorroza: Solitario. Más iluminación. Zona de droga.Puente de Siete Campas: No se ven bien las entradas y salidas. [Ver
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VIZCAYA
Iluminación, pasos de cebra y teléfonos
La luz siempre ha dado sensación de seguridad. De ahí que dotar a todos los barrios de un buen sistema de alumbrado sea una de las demandas más reclamadas por las mujeres, que no la única. Entre las propuestas que se recogen en el informe de los colectivos femeninos, destacan también la de mantener las calles limpias o instalar más cabinas de teléfono a las que poder recurrir para denunciar posibles casos de
emergencia.Las asociaciones plantean también fomentar la actividad comercial, de cara a evitar que algunas calles estén desiertas, o intentar que el transporte público circule por el mayor número de vías posible. Abogan por evitar los soportales y las entradas 'trampa' a garajes.

1 comentario:

June Fernández dijo...

Qué interesante e importante. Justo hoy estamos hablando en casa de la falta de información (autodefensa, cómo evitar riesgos, etc.) sobre violaciones. Además, me parece apasionante aplicar la perspectiva de género de manera transversal en áreas como el urbanismo y la arquitectura.